Somos energía, simple y sencillamente eso somos. Todo lo que nos rodea es producto de un intercambio energético que ocurre a nivel molecular en proporciones desconocidas para mi, pero que de alguna manera termina afectando de alguna forma distinta el anímo o el estado presente de nuestra forma de ser en el preciso momento en el que te das cuenta que hay algo que como que no cuaja, no está bien o no se siente bonito.
Tratando de ser la mejor persona que puedo ser y hacer lo que honestamente está a mi alcance según mis facultades, conocimientos y nivel de batería mental me encuentro en ocasiones en un tres y dos que no se ni como lidear con eso pero definitivamente activan mis instintos FF o sea Fight or flight! Cosa mala.
El 80 porciento de mi día es rodeado de una carga energética que me abruma, pero que trato de controlar, nunca en mi vida había sentido algo así, es bien interesante. En esta época ando con 30 cristales encima, baños de agua florida, prendiento Nag Champa cuando puedo para sentir que se alivia la carga que siendo a mi alrededor, que se nivelan los mares y que las aguas vuelven a su cauce. A la larga termino agotado, pero me toca seguir caminando ya que esto es lo que me hace más fuerte!
